Rocío sonríe desde su puesto en la casilla de guardavidas
La imagen muestra a Rocío en la casilla de guardavidas del Centro Recreativo Comunal. Allí puede resguardarse en parte del calor que provocan los rayos del sol bombalense. Dado que su trabajo es velar por la seguridad de grandes y chicos que eligen la pileta, pasa varias horas por día junto a la misma.
Mientras transcurre su jornada laboral, los bañistas que llegan a la piscina disfrutan y se divierten, o participan de alguna clase de ejercicios acuáticos.
Sonriente, tranquila, Rocío tiene un trato amable y amistoso. Aceptó también posar para las fotos de Bombal Express. ¡Muchísimas gracias!